Es posible, una unión de empresas permite, mediante la unión de sus esfuerzos desconectar de la red la instalación de una granja de producción láctea, que conseguirá de este modo un ahorro estimado de 46.000 euros en costes de gasoil, y una reducción de 98,31 toneladas de emisiones de CO2 al año. Esta granja con un alto un nivel de producción ha puesto en marcha este sistema en colaboración con empresas del sector de las instalaciones eléctricas industriales. Un sistema que proporciona el suministro diario de la demanda eléctrica mediante una planta solar de 150 kW montados en cubierta, un inversor/cargador de 200 kVA y un banco de baterías de plomo ácido de 300 kWh.  La alternativa permite mantener apagado el grupo electrógeno entre el 85-90% del año, con el consiguiente ahorro energético en gasoil y un menor índice de contaminación en la zona y especialmente a las propias vacas de la explotación lechera. Desde el punto de vista medioambiental, se ha logrado una drástica reducción de la dependencia de combustibles fósiles equivalente a 40.961 litros/año de gasoil. Y un ahorro anual de emisiones de 98,31 toneladas de CO2.